Por Katie Heaney

• 2 sobre marzo de 2018

Lydia y no ha transpirado yo nos conocimos gracias a un cuestionario, la evaluacion sobre temperamento sobre decision multiple de OkCupid, que te duda cosas igual que “?Un holocausto nuclear te pareceria emocionante?” (en mi caso, la replica fue nunca) y no ha transpirado luego te relaciona con aquellas seres a las que tienes menos probabilidades de odiar.

Nuestra primera citacion fue un lunes, de escoger unos tragos despues de un conmemoracion sobre trabajo durante el cual hice enormes esfuerzos Con El Fin De nunca confesar sobre angustia. Iba an acontecer mi primera citacion con una chica. La agende unos diez dias despues de que les habia citado a mis amigas “No soy hetero, pero luego les dire exactamente que tan nunca hetero soy”. Tenia 28 anos.

Le envie a Lydia el primer mensaje, preguntandole En Caso De Que podia leer la reinterpretacion sobre fan, o fanfic, gay de Harry Potter que ella habia mencionado en su cuenta. Poco luego me invito a salir. Estaba emocionada por conocerla, sin embargo cualquier estaba pasando bastante pronto (En caso de que incluimos los 28 anos sobre confusion anteriores).

Hasta primero sobre eso, habia dado por hecho que era heterosexual y suponia solamente que era la pesima heterosexual. Jami?s habia tenido novio asi­ como ni siquiera me habia acostado con un varon y nunca me gustaba irse ni quedar con ellos, pero pensaba que era normal; la totalidad de mis amigas se quejaban todo el lapso sobre los tipos con los que salian.

Sabia que estaba haciendo algo mal, aunque no sabia que. En ocasiones, pedia asistencia a mis amigas. Cuando no estaban disponibles o se cansaban sobre mi, recurria an una causa sobre auxilio y no ha transpirado consuelo de toda la vida la demostracii?n sobre posibilidad multiple.

Mi habito comenzo en la escuela secundaria, en el reverso de revistas como CosmoGirl, Seventeen y Teen Vogue, a donde los tests sobre unas cuantas preguntas prometian orientar a las chicas en diversos temas, que iban desde “Como conocer si le gustas” a “?Que tanto le gustas?”. Cada conmemoracion sobre San Valentin en el bachillerato, nuestros maestros sobre la primera especie nos daban formatos para lector electronico de un servicio llamado CompuDate, que prometia buscarle a cada adolescente hormonal el companero de especie del sexo opuesto mas compatible, falto importar las consecuencias sociales. A mi (que no era popular) me puso con Mike P. (que era harto popular), quien lo tomo de buen modo, sin embargo fue humillante de ambos.

Comunmente, al culminar la universidad la gente dice adios a las competiciones sobre alternativa multiple, pero yo nunca podia dejar sobre hacerlos. Cuanto gran me hacia, menos decision sentia en que tan bien me conocia a mi misma desplazandolo hacia el pelo mas buscaba en el exterior algo que me diera pistas.

?Por que le daba an una demostracii?n sobre cuatro dudas escaso experto, mal escrita e inventada mas prestigio que la que me daba a mi misma?

En retrospectiva, quiza debe encontrarse sabido quien era despues sobre Durante la reciente vez que busque la demostracii?n convocatoria “?Soy gay?”, No obstante nunca fue de este modo. La coleccion de tests en sexualidad disponible en la red seri­a vasta. No obstante la primera ocasion que busque, en 2010, ansiosa por alcanzar respuestas acerca de mi solteria perpetua, las pruebas en linea todavia eran fascinantemente poquito profesionales, con dispares tamanos sobre letra e imagenes predisenadas. Suvenir que habia cuestiones politicamente incorrectas y no ha transpirado diferentes que eran tendenciosas, como “Cuando piensas en el arquetipo de alma con la que te deseas casar, ?tiene cabello corto, como un hombre, o generoso, igual que una chica?”. Un test supuso que mi desinteres en manejar una camioneta sobre exigencia era una prueba evidente sobre que, en resultado, no era lesbiana.

Antes de concluir cada prueba, era igual que si bien supiera la solucii?n, porque invariablemente era exactamente la que queria que externamente. Si tomaba un test de asegurarme sobre que era heterosexual, ese era el resultado; si queria que individuo me dijera que era homosexual o bisexual, lo obtenia. Sin embargo, ningun consecuencia era lo suficientemente contundente Con El Fin De hacer que dejara sobre contestar cuestiones.

Por fin me di por vencida. Supuse que de no ser heterosexual —o de acontecer todo otra cosa que nunca fuera normal— lo habria sabido desde bastante tiempo antes.

Me mude A nueva York, en donde sali con un varon a lo largo de unas cuantas semanas primero sobre que el novio terminara conmigo; luego paso exactamente lo con otro hombre. Pense que quiza mis fracasos con las citas se debian a simple incompatibilidad y a las incalculables defectos del sexo viril. Le conte al completo a mi terapeuta, antes de dejar de ir a esa terapia y conseguirme otra terapeuta.

Entretanto al completo eso sucedia, trabajaba en BuzzFeed, justamente elaborando tests. El proceso era relativamente aburrido, en especial en aquel momento, cuando el organizacion sobre gestion sobre contenidos era defectuoso y sobre poquito afan publico. Sin embargo, la elaboracion de competiciones era empoderadora, lo que desea afirmar que me hacia percibir como En Caso De Que fuera Dios.

Fue mi segunda terapeuta, la buena, quien me ayudo a darme cuenta de que mi vida amorosa inexistente no era una disputa cuantitativa, sino cualitativa.

“?Que https://datingranking.net/es/meet-an-inmate-review/ sientes cuando te imaginas salir en una primera cita con un hombre?”, me dijo.

“Basicamente, terror”, conteste. “Pero eso es normal, ?no?”.

Es que realmente no lo es. Es normal advertir nerviosismo, mas nunca pavor.

No lo sabia. Nunca sabia que podia procurar alguna cosa nuevo primero de ser conscientes que lo queria.

Por fin tenia las respuestas que queria porque era yo quien las escribia.